Prizren: Entre caos, mezquitas y un mercado navideño
Llegué a Prizren después de un viaje largo, que comenzó en Budva, Montenegro. Y cuando digo largo, me refiero a un viaje que parecía una especie de juego de lógica mal armado. Si uno tiene experiencia en logística (como yo), inmediatamente detecta las incoherencias, y este trayecto las tenía todas. ¿Por qué no ir directo desde Budva a Prizren? Pues no, tuve que atravesar Albania como si fuera un laberinto, todo para llegar a Kosovo de una manera que nadie entendería. Pero claro, cosas que pasan.
Lo primero que hice al llegar al hostel fue ponerme a armar un mapa (sí, esos de papel, viejos tiempos), y salir a caminar por los lugares céntricos. Vi un par de monumentos sin mucho que resaltar, y me dirigí a un supermercado cercano. Necesitaba provisiones porque, después de todo el viaje, mi estómago no sabía si pedir un hotel o una pizza.
Ambiente cultural y pintoresco de Prizren
Vista panorámica de la ciudad de Prizren
El día siguiente se puso más interesante, o eso creí. Me dirigí al Castillo de Prizren, un poco caminata, un poco subida, pero nada que dejara mis piernas pidiendo auxilio. El panorama desde arriba es increíble, es como tener la ciudad a tus pies. Más de 15 mezquitas se podían contar a simple vista, y no exagero, Prizren parece tener una mezquita por cada habitante. A mediodía, justo a la hora del rezo, el aire se llenó de plegarias mezcladas que, aunque no entendiera ni una palabra, me dejaban claro que en esta ciudad la religión es un asunto sonoro y contundente.
Almorcé allí mismo lo que había preparado, mientras observaba el panorama, y luego volví al hostel. Fue en ese momento cuando conocí a Francesca, una italiana de Firenze, sencilla, alegre y, debo admitir, extremadamente linda. Empezamos a hablar de nuestros estilos de vida, yo le conté el mío, y ella me explicó que trabajaba toda la primavera y el verano en Firenze, para después salir a recorrer el mundo. Qué clase de vida, ¿no? Me atrajo desde el minuto uno. Fuimos al mercado navideño a probar un par de cosas, y en esos dos días compartimos risas, aventuras y planes improvisados. Aunque la vida no nos ha reunido de nuevo, intercambiamos contactos, por si alguna vez los destinos se alinean. En ese momento, yo me iba a África (que terminó siendo Asia) y ella partía hacia el Kurdistán iraquí. Sí, al Kurdistán iraquí. No puedo más que admirar a esa genia de la vida.
Al día siguiente, decidí caminar un poco más por la ciudad antes de dirigirme a la terminal de buses para comprar el pasaje a Skopie. Para mi sorpresa, una de las chicas que trabaja en la terminal hablaba español, lo que hizo que todo el proceso fuera mucho más sencillo de lo que había anticipado. Después de eso, volví al hostel, cenamos juntos, y así terminó mi corta estancia en Prizren.
En cuanto a la gastronomía, la comida no es para volverse loco, pero tiene lo suyo. Probé un par de platos locales, especialmente en el mercado navideño, donde las cúpulas de pan y las carnes asadas le daban un toque particular al aire frío. La comida kosovar tiene algo simple pero contundente, algo que se disfruta mientras charlas con alguien como Francesca, o cuando estás solo mirando las luces del mercado navideño en medio de la noche helada.
Prizren es una ciudad que vale la pena visitar por un corto tiempo, especialmente si se te da por recorrerla en primavera. Durante mi estancia en otoño, el frío se hizo sentir de manera tan directa que me pregunté por qué no había planeado mi viaje para otra época. La ciudad es pequeña, su historia no grita desde sus calles, pero sus mezquitas, mercados y su gente te invitan a reflexionar sobre un pasado reciente, marcado por los conflictos con Serbia. ¿Es segura? Totalmente. Y si no te gusta el frío, olvídate del invierno. Hay unos mercados navideños que valen la pena, pero te aseguro que las montañas estarán bajo una capa de nieve que ni vale la pena intentar visitar. Así que, si decides ir, prepárate para una experiencia rápida pero enriquecedora, y sin dudas, no olvides traer ropa abrigada, ¡porque el frío no perdona!
Rincón histórico en el centro de Prizren
Paisaje urbano de Prizren
Vista panorámica de la ciudad de Prizren